En la industria alimentaria, la aplicación de la cavitación hidrodinámica ha ganado popularidad en diversos campos como:
- pruebas no invasivas,
- homogeneización,
- extracción,
- desgasificación,
- cortar alimentos congelados o blandos,
- antiincrustante,
- destrucción microbiana,
- etc.
La cavitación hidrodinámica ha demostrado un gran potencial para modificar las moléculas que componen la leche, mejorar la eficiencia del procesamiento de la leche y los productos lácteos, la seguridad alimentaria, la destrucción microbiana, el análisis no destructivo, la limpieza de las superficies de los equipos y la gestión de residuos.
Una de las limitaciones de la cavitación ultrasónica es la dificultad de utilizarla en un proceso continuo con un alto caudal.
La cavitación hidrodinámica, por el contrario, presenta en este caso una ventaja, ya que se puede aplicar fácilmente en un proceso continuo.
Aunque ya se han identificado numerosas aplicaciones, todavía existen numerosas aplicaciones posibles y no probadas: dados los resultados obtenidos hasta ahora, es necesario explorar la aplicación de la cavitación hidrodinámica en la industria láctea.
La mayoría de las investigaciones basadas en la cavitación hidrodinámica se han centrado en productos lácteos como la leche, la nata, el queso, el yogur y los ingredientes proteicos de la leche.
Sin embargo, a medida que la tecnología se consolida en esta área, la cavitación hidrodinámica también se puede aplicar a otros productos lácteos como la grasa láctea anhidra y la mantequilla.
Actualmente, la cavitación puede ofrecer muchos beneficios a la industria láctea, pero con más estudios y aplicaciones se cree firmemente que puede proporcionar un impulso significativo al sector.