Ejemplo práctico de una almazara de tamaño pequeño o mediano diseñada para procesar unos 6.500 quintales de aceitunas al año, en parte por cuenta propia y en parte por cuenta de terceros.
Desde el momento de la cosecha, las aceitunas deben procesarse posiblemente el mismo día o, como máximo, en 2 días para evitar reacciones de fermentación y/o degradación de las aceitunas.
Teniendo en cuenta que casi todas las aceitunas de una determinada zona geográfica alcanzan la madurez y se recolectan en tiempos extremadamente cortos, no hace falta decir que las almazaras tienen que concentrar su actividad en unas pocas semanas al año y que, por tanto, sus dimensiones deben calibrarse para dividir la carga total prevista en un período de unos 2 meses.
Consideremos una producción de aceite EVO de entre 10 y 20 litros por cada 100 kg de aceitunas procesadas; cada litro de aceite pesa unos 920 gramos.
Con nuestro proceso obtenemos alrededor de un 20% más de calidad de producto que con un proceso de elaboración tradicional por lo que nos acercaremos a la obtención de 20 litros en lugar de 10: si de 100 kg de aceitunas obtenemos 15 litros con el sistema tradicional con CavitOil obtendremos unos 18 litros de aceite.
En lugar de separar hueso y orujo, nos limitaremos a secarlos ambos para llevarlos al 10% de humedad y utilizarlos en la planta de microgasificación suministrada con el sistema.
Sabiendo que la electricidad representa entre el 75 y el 83% de los costes de una almazara, la transformación de los residuos de la elaboración en energía inmediatamente utilizable para la propia elaboración representa un beneficio adicional del sistema CavitOil.
El calor del proceso de gasificación se utilizará, durante el funcionamiento normal de la almazara, para secar el orujo y los huesos y posteriormente estará disponible para calefacción urbana, invernaderos, bombas de calor, etc.
Además, el proceso de elaboración de CavitOil se realiza a temperatura ambiente por lo que no es necesario utilizar energía térmica, con lo que se aprovechan al máximo las aproximadamente 4.400 kcal de orujo con hueso.
El peso seco del orujo, incluidos los huesos, supone aproximadamente el 25% del peso total de las aceitunas entrantes (unas 162,5 toneladas frente a 6.500 quintales de aceitunas). En 60 días se procesarán 108 quintales de aceitunas cada día (7 por hora) con un consumo estimado de 32 kWh.
Por ello, creemos prudentemente que necesitamos un sistema energético capaz de suministrar 50 kWh mediante gasificación.
Por lo tanto, considerando una media prudente entre orujo seco y hueso igual a 4,4 kcal por kilogramo y un rendimiento de transformación eléctrica de aproximadamente el 35%, se obtiene una cantidad potencial de energía que es capaz de alimentar eléctricamente la trituradora durante el período de procesamiento, así como producir la necesaria para alimentar la estructura durante una buena parte del año (más de 310 días al año durante 16 horas al día).
Finalmente, hay que tener en cuenta que al tratarse de electricidad de producción propia, reduce completamente los costes de la factura energética y no solo los componentes relacionados con el elemento energético.
El mayor rendimiento de aceite lleva a la producción de aproximadamente 19.500 litros más de producto, 15.000 de aceitunas de propiedad.
Manteniendo firmes los valores previstos para las cantidades de aceitunas, el ahorro anual sumado a los mayores ingresos por producción extra de aceite puede superar los 230.000,00 € cada año. Sin tener en cuenta que con la adopción del sistema de cavitación y del decantador, la planta podría gestionar cantidades mucho mayores anualmente.
